El conflicto de Gaza ya no aparece en portada de los medios españoles, cobrando mayor protagonismo la respuesta del Gobierno, las Comunidades Autónomas y los Ayuntamientos al temporal de nieve que azota la península. Continúa el debate, en cambio, en la prensa israelí, y hay opiniones para todos los gustos. El Judaísmo no justifica las matanzas, ni siquiera si las víctimas son terroristas, pero el hartazgo y las ganas de reaccionar ante la violencia de Hamás está dando alas a un aumento preocupante del racismo y del odio en el corazón de la sociedad israelí, afirma Gideon Levy en el diario Haaretz. Levy señala la hipocresía de los que por un lado piden que continúe la guerra y después buscan limpiar su consciencia reclamando ayuda humanitaria para los que siguen todavía vivos.
Jonathan Boyd tampoco se siente tranquilo con el bombardeo del Ejército de la Defensa Israelí (IDF). Se preocupa por las personas que ante las imágenes de los niños muertos por los disparos siguen sin sentirse conmocionadas. Su sensación es de desesperación. Israel ha intentado todo para buscar una solución al conflicto y ahora un país que en otros temas ha demostrado su gran capacidad de aplicar sus mentes y sus corazones a buscar soluciones a algunos de los problemas más complejos que acechan la humanidad, ahora tiene que recurrir a la violencia para garantizar su propia seguridad.
"Parece que la sensación en Israel en el verano de 2009 y el de ahora son tres cuartas partes de lo mismo. Nada funciona. No logramos seguir ocupando el territorio por la fuerza, fracasan las negociaciones con el liderazgo palestino, fallan los intentos de mediación por parte de terceros, y cuando nos retiramos de forma unilateral... como hicimos en 2006... tampoco logramos ninguna solución. Ante esta situación sólo nos queda una posibilidad: luchar. No porque creamos que vaya a funcionar como estrategia a largo plazo, sino porque ya no nos queda alternativa. Cada cierto tiempo, - cada dos o tres años-, tendremos que luchar, no porque creamos que así se resolverá el conflicto (sabemos que no va a ser así), sino porque de vez en cuando tenemos que gestionarlo de esta forma para que no escale aún más y resulte incontrolable".
Tanto Haaretz como el Jerusalem Post ofrecen argumentos a favor y en contra de la operación militar, y analizan de manera objetiva las reacciones en el resto del mundo. Nos informan del cierre de los colegios judíos de Venezuela tras la expulsión del embajador israelí por Hugo Chávez y el riesgo de ataques antisemitas en el país suramericano. Por otra parte, El Jerusalem Post, informa de las manifestaciones a favor de Israel previstas en diversas ciudades europeas.
Haaretz, por otra parte, reproduce un artículo de opinión muy interesante de la periodista catalana, Pilar Rahola, acerca de la Histeria Antisraelí en Europa. El artículo original se publicó en La Vanguardia.
sábado, 10 de enero de 2009
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