lunes, 23 de febrero de 2009

Duras negociaciones para formar un gobierno

Interrumpida durante dos semanas la actualización diaria de este blog, debido a la misteriosa-, y gracias a las fuerzas de policía, temporal-, desaparición del ordenador de este servidor, hoy vuelvo a reiniciar la actividad y me disculpo por mi ausencia. Una ausencia que ha coincidido con hechos tan importantes como las elecciones en Israel, cuyo resultado definitivo aún se desconoce. Aunque parece cada vez más seguro que el Gobierno resultante estará liderado por el Likud, con Benyamin Netanyahu como Primer Ministro, queda por ver cómo se dibuja el escenario político debido a la proliferación de los pequeños partidos, y por el hecho que el partido más grande en el Knesset es, en realidad, el centrista, Kadima. El Likud tiene que elegir entre pactar con los laboristas y/o Kadima, vencedor en las elecciones pero sin una mayoría suficiente para gobernar, o aliarse con los partidos de extrema derecha, lo que seguramente no conduciría a ningún lado, y terminaría acortando la vida del Gobierno, incapaz de cumplir las demandas de radicales como Avigdor Lieberman, líder del partido, Yisrael Beytenu.

Ayer, domingo, según el Washington Post, Netanyahu ha mostrado su lado más conciliador, y se ha comprometido a trabajar junto con Estados Unidos para promover la paz en la región. Las negociaciones son complejas. Tzipi Livni, la Ministra de Exteriores saliente, y candidata de Kadima, busca una solución basada en dos estados. En cambio, el Likud la rechaza y en cambio defiende un acuerdo económico con los Palestinos y la ampliación de los asentamientos de los colonos judíos en territorio palestino.

Mientras tanto, continúa la violencia. Hace pocas horas, el ejército israelí ha logrado evitar un grave atentado terrorista al encontrar un grupo de palestinos armados que intentaban colocar una bomba en la frontera con Gaza, según nos informa el Jerusalem Post. Por su parte, los judíos se han movilizado en Internet para hacer frente a los hackers palestinos que proliferan en las redes sociales como Facebook y atacan a páginas pro-israelíes. De momento, al parecer, los moderadores de Facebook se han negado a eliminar los grupos de usuarios que promueven el odio hacia Israel.